Deportes Manzanedo Calle Madrid – Burgos

Trato excelente por parte de las dependientas! Nos han asesorado con mucho interés y nos facilitado otra talla que no tenían, pidiendo a la otra tienda, para probar sin compromiso. Se nota la atención y dedicación del equipo. Muchas gracias.

Somos un grupo d peregrinos d USA, q venimos con 95 jóvenes desde New Jersey para asistir a la JMJ en Lisboa. Ayer tuvimos q dormir al aire libre bajo las estrellas y nos dimos cuenta q 3 d ellos no habían traído saco d dormir. Hemos venido a esta estupenda tienda d deportes dnd hemos encontrado unos dependientes súper amables y entrañables. Les hemos pedido q tuvieran una deferencia con estos jóvenes q vienen sin dinero pq ya han gastado todo lo q habían ahorrado para poder llegar hasta aquí. Han tenido misericordia y nos han hecho un descuento, tanto como podían a pesar d estar ya rebajados. Estaremos eternamente agradecidos a ellos pq hoy y en los próximos días 3 jóvenes podrán dormir calentitos y protegidos gracias a su amabilidad. Estoy segura q Dios bendecirá este hecho y podrán recordarlo igual q nosotros no lo olvidaremos.

Una manera de perder un cliente (o cómo no ser mínimamente flexible atendiendo un comercio): En una tienda de deporte de Burgos en la que soy (era) cliente mas o menos habitual, así, sin pensar demasiado, llevo comprado en los últimos años: – Al menos siete pares de zapatillas de correr (cuatro para pies propios, tres para ajenos). – Un par de botas y otro de zapatillas de montaña. – Dos pantalones de atletismo. – Un cortavientos. – Diversas prendas para regalar o para abastecer a los de casa (bañador, gafas de piscina, guantes, pantalones de chandall, sudaderas, calcetines…). – Algún material de montaña (cantimplora, bastones, pantalón y, creo recordar, una mochila). – Ropa de mi equipo de atletismo. -… ¿Mil y pico euros? ¿Quizá 2000 si dedico más tiempo a pensar? Pues bien. Resulta que tengo aún menos de Mago que de Rey y que mi última compra (89,90 euros) en el establecimiento con ánimo de regalar el día 6 no fue precisamente acertada. Por eso, hoy día 8, primer día hábil después de la fiesta, devuelvo el artículo pero no recupero el dinero (me dan un vale) acogiéndose a la norma de que solo realizan las devoluciones realizadas antes de dos días tras la compra. Hasta mi padre y mi tío, que cerraron su tienda de deportes en Santander hace ya veinte años y que no eran precisamente un dechado de modernidad y de innovación comercial, devolvían el importe de las compras devueltas y mostraban especial flexibilidad en las «fechas críticas» (papanoeles, reyes, inicios de rebajas,…). ¿Que es su política y que ante eso no se puede objetar nada? Pues quizá sí, aunque para eso está el organismo de arbitraje de consumo que atenderá la reclamación interpuesta. ¿Qué hay un cartel que indica dicha norma y que también se refleja en el ticket? Sí. Y que el cartel está sobre el mostrador justo donde tú dejas el género y lo tapas la mayor parte de las veces, así como en el ticket, que lo recibes lógicamente una vez hecha ya la compra. ¿Qué tienes dos días? Sí, pero Melchor no puede preguntar el 4 si al regalado le gusta lo que va a recibir el 6. ¿Qué el comercio «físico» sufre una brutal competencia del comercio online (del que también dispone la tienda en cuestión)? Por supuesto, pero no sé si estas tácticas defensivas sirven para minimizar o para agravar el problema. En mi caso hasta ahora, HASTA AHORA, mi política para comprar zapatillas era elegir posibles modelos, pasarme por esta tienda en PRIMER LUGAR a ver si los tenían y, en caso positivo, comprar sin entrar a comparar precios on line. Todo ello por no hablar de las grandes cadenas del comercio deportivo, que tendrán sus partes oscuras pero que en política de devoluciones son capaces de cogerte unas zapatillas sudadas después correr el Maratón des Sables si les sacudes la arena previamente. Total: que peor para todos. Para la tienda y para mí. Noventa euros han tenido la culpa. Noventa euros que, de una forma u otra, antes o después, iban a acabar en el establecimiento.

Muy atentos , rapidez en la gestión que hicieron para atender mi petición, y amabilidad por parte e los dos empleados que me atendieron tanto en la tienda de Gramontagne como en la Calle Madrid

Hola compre unas zapatillas de Malllorca para el camino y al dia siguiente me di cuenta que para mi les faltaba tacón, poca diferencia entre la parte de dekante y el tacón. Fui al dia siguiente sin usarlas Y EL DE LA CAJA NO SÓLO ME DIJO «CON EL TIEMPO QUE ESTUVISTE AQUI….» COSA QUE ESO SOLO LO DICE UNA PERSONA MAL EDUCADA, SINO QUE COMO NO TENIA LA CAJA NO ME DEJÓ CAMBIARLAS POR UNAS SALOMÓN QUE DUDABA EL DIA ANTERIOR. NO ME LAS QUISO CAMBIAR PQ LE IMPORTAN NADA LOS CLIENTES. Y EFECTIVAMENTE ME REVIENTAN LOS TOBILLOS Y LOS TALONES, QUE LLEGO CON ELLOS DORMIDOA. LAS ZAPATILLAS DE 135 EUROS. Y ENCIMA AL DIA SIGUIENTE LES MANDO UNA CLIENTA CHINA. ESPERO QUE TE PASE LO MISMO DESGRACIAO POR TENER TAN POCA EMPATIA. Y. DECIRME QUE SIN CAJA NO SE PUEDE. NO TENDREIS CAJAS POR AHI DE SOBRA!! GRACIAS POR TU «MALDAD» PQ ESO ES MALDAD.

Me encanta ir a esta tienda, siempre que voy me tratan fenomenal, buen equipo!!!!!

Personal muy agradable y atento. Las deportivas he ido dos días y le han traído solo para que me probará otras de otra tienda. Volveré

La variedad no es excesiva. En mi caso, botas Nike de tacos para adulto, he encontrado exactamente 2 pares sueltos, casi iguales. Sin embargo, debo decir que es el único lugar de Burgos donde las he encontrado. El personal atento y amable. Lo que no veo muy bien es que para devolver el dinero (es un regalo) solo disponga de 2 dias: viernes y sábado. Es decir, un dia y medio. Y en plenas fiestas. No me parece un plazo muy correcto y ni siquiera se si eso es legal. Aún así, y visto lo visto, la mayor variedad de Burgos.